Pese a no poder contar con Sadio Mané y Mohamed Salah, que se enfrentan este domingo en la final de la Copa de África, el Liverpool se clasificó con comodidad a octavos de la Copa de Inglaterra al dominar 3-1 al Cardiff (segunda división).

Ante un adversario más preocupado por su permanencia en la Championship y que formó con un once con varios jóvenes y suplentes, los Reds marcaron la diferencia en el segundo tiempo por medio del portugués Diogo Jota (53), del japonés Takumi Minamino (68) y de Harvey Eliott (76), quien regresaba de una grave lesión en el tobillo izquierdo en septiembre, antes de que Rubin Colwill (19 años) redujese la diferencia (80).