Francia, vigente campeona del mundo, cerrará la primera fase de Catar-2022 contra Túnez el martes, en un partido casi intrascendente para los 'Bleus', ya clasificados para octavos de final, aunque los norteafricanos aún tienen posibilidades, mínimas, de meterse en los cruces.
Dos partidos y dos victorias, con actuaciones convincentes (4-1 a Australia y 2-1 a Dinamarca), han llevado a octavos al equipo de Didier Deschamps, que salvo catástrofe, una derrota frente a Túnez y goleada de los 'Socceroos', tiene además asegurado el primer puesto de su grupo, que en el primer cruce se medirá al segundo del grupo de Argentina.
Deschamps, no obstante, reiteró en conferencia de prensa que su equipo saldrá a competir: "No hay que tirar este tercer partido (...) Es un encuentro de Copa del Mundo. No es decisivo, pero sí es importante para mí y para los jugadores. ¿Habrá cambios? Sí ¿Cuántos? No lo sabrán y, sobre todo, el rival tampoco lo sabrá".
Con la clasificación en el bolsillo y la posibilidad de enfrentarse a Messi y la Albiceleste en octavos (como ya ocurrió hace cuatro años en Rusia, con victoria gala 4-3), Didier Deschamps dará descanso a varios de sus titulares, empezando por la portería, donde el veterano Steve Mandanda (37 años) debería ocupar la plaza del capitán Hugo Lloris como premio también a todos los años de trabajo en la sombra del ahora portero del Rennes.
Las rotaciones también llegarán al centro del campo, donde Aurélien Tchouameni y Adrien Rabiot deberían dejar su puesto a Youssouf Fofana y Mattéo Guendouzi y solo conservará su puesto Antoine Griezmann, básico en el esquema de Deschamps como enlace entre los delanteros y el bloque defensivo.
Para los tunecinos las cuentas son claras en vistas a una eventual clasificación para octavos: victoria contra los 'Bleus' y esperar que Australia no gane a Dinamarca, aunque en ese caso habrá que tener en cuenta la diferencia de goles (-2 para los 'Socceroos' y -1 para norteafricanos y nórdicos) y el resto de criterios de desempate, que podría llegar incluso a decidirse por el número de tarjetas.
Túnez contará con el apoyo de sus hinchas, muy numerosos en Catar, pero tiene un hándicap grande: la falta de gol. Es, junto a Uruguay y México, los únicos equipos que aún no han marcado tras la disputa de las dos primeras jornadas.