Roma, que tenía la amenaza de perder la organización de sus cuatro partidos de la Eurocopa de fútbol este año, garantizó la presencia de "al menos un 25%" de público en el Estadio Olímpico, anunció este miércoles la UEFA, que "confirmó plenamente" a la capital italiana entre las ciudades organizadoras del torneo.
El partido de apertura de la Eurocopa, entre Italia y Turquía el 11 de junio, queda por lo tanto confirmado en Roma.
"La UEFA recibió hoy (miércoles) la confirmación del gobierno italiano, a través de la Federación Italiana de Fútbol, sobre que los partidos de la Eurocopa-2020 previstos en el estadio Olímpico se disputarán con público", con una capacidad de "al menos el 25% de la capacidad del estadio" (68.000 espectadores en época normal).
La UEFA precisó sin embargo que los hinchas extranjeros que deseen viajar a Italia para asistir a los partidos del torneo no tendrán "ninguna exención" en lo referente a las restricciones vigentes sobre desplazamientos y las normas de eventual cuarentena.
La presencia de aficionados pese a la situación sanitaria ha sido impuesta por la instancia bajo pena de ver cómo se le retira la organización a las ciudades que no cumplan este requisito.
Solo tres de las doce sedes inicialmente previstas siguen bajo la amenaza de quedarse sin la Eurocopa, Bilbao (España), Dublín (Irlanda) y Múnich (Alemania), cuando se espera una decisión final el lunes durante la reunión del Comité ejecutivo de la UEFA.
La pasada semana, la Federación Española de Fútbol (RFEF) admitió que veía "inviable" la eventual presencia de espectadores en Bilbao durante la Eurocopa por las restricciones y condiciones impuestas por el gobierno regional del País Vasco contra la pandemia.
"La exigencia de tener un 60% de la población vacunada en el País Vasco y resto de España antes del 14 de junio, o una cifra que no supere el 2% de las camas de las UCIS ocupadas por covid para la fecha de los partidos, son objetivos imposibles de cumplir y desembocarán, por tanto, en la ausencia de público", dijo entonces la RFEF.
Según la prensa española, la RFEF estaría negociando la posibilidad de que otra ciudad del país, como Sevilla o Madrid, pudiera acoger los partidos si finalmente la opción de Bilbao es descartada.
- Planes desiguales -
Las otras ciudades organizadoras se han comprometido a acoger espectadores en sus gradas en distintos grados, con límites que van desde el 25 al 100%.
La ciudad de Londres, que debe acoger siete partidos -entre ellos las dos semifinales y la final-, ha presentado un plan para contar con "un mínimo del 25%" del aforo en los tres partidos que albergará en la fase de grupos y confía en tener "una capacidad superior" para las rondas finales del torneo.
Budapest contemplaría la posibilidad de contar con las gradas llenas, con espectadores que cumplan una serie de condiciones. San Petersburgo y Bakú prometieron una capacidad del 50% y propondrían a los aficionados extranjeros "procedimientos especiales que les eximan de las restricciones de entrada o de cuarentenas", según la UEFA.
Ámsterdam, Bucarest y Copenhague plantearían una capacidad entre "el 25 y el 33%" de espectadores, pero reservándose la posibilidad de "aumentar sus capacidades de aquí al final de mes". La UEFA les dio de plazo hasta el 28 de abril para ajustar sus planes en este sentido.