Cuando hablamos del término Cenicienta en el deporte nos referimos a esas situaciones en las que un equipo, en este caso, logra tener grandes resultados que superan las expectativas que se tenían sobre él. De ese triunfo del menos favorecido, del que puede verse como débil o que sale de la sombra para brillar y quedarse con la “zapatilla de cristal”.

En el caso de la temporada 2022-2023 de la NBA, el protagonista de este cuento es Sacramento Kings. Un equipo que comenzó esta edición con cuatro derrotas consecutivas, sin mucho renombre y con un pasado oscuro que no lo hacían merecedor de las primeras planas.

Esto fue cambiando con el pasar de los partidos, hasta llegar al 29 de marzo, cuando enfrentaron a los Portland Trail Blazers. Y no fue de cualquier manera, fue una verdadera paliza 120-80 como visitantes.

Un triunfo que siempre quedará en la retina de los aficionados de los Kings, pues acabó con una sequía de 16 años en los que la franquicia no lograba clasificarse a los Playoffs, siendo la más larga, en los 76 años, de la NBA. La última vez que habían jugado una serie de postemporada fue en el 2006, cuando clasificaron octavos de la Conferencia Oeste y cayeron en primera ronda ante los San Antonio Spurs.

Fiesta en toda la ciudad y uno de los momentos más icónicos de esta campaña. La clasificación anticipada le dio tranquilidad en los primeros días de abril mientras veía a otros batallar por un cupo como el que habían conseguido. Finalmente, terminó la fase regular tercero con un récord de 48-34, superando a quintetos con mayores pergaminos al inicio como los Suns, Warriors y Lakers.

Primer premio Clutch player de la historia

Si nos trasladamos al contexto de nuestro continente, estaríamos hablando de esos grandes jugadores que suelen aparecer en la ‘chiquita’, esos últimos minutos del último cuarto donde se define un partido cuando el marcador es cerrado. La Liga decidió que desde esta temporada se comenzara a premiar al mejor jugador en este momento. Y sí, adivinaron, pertenece a la plantilla de los Sacramento Kings.

Con 91 votos de 100 posibles, De’Aron Fox se convirtió en el primer ganador de este premio, sumando un total de 460 puntos. El base del equipo californiano, en pocas palabras, fue escogido como el jugador más decisivo en los momentos finales de un partido, y es que ha liderado la temporada en puntos en los últimos 5 minutos, cuando la diferencia en el marcador no supera los 5 puntos, con un total de 194 unidades, superando a Lebron James de 2018.

Fox terminó con un 52.9% en tiros de campo y 86% desde la línea de tiros libres en el clutch, logrando 3 tiros ganadores, lo que lo convirtió en el primero en puntos en la ‘chiquita’ y el primero en puntos en el cuarto periodo.

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El eje central de los Sacramento Kings

Otro de los personajes centrales de este cuento, uno que para muchos es el protagonista de la historia que están escribiendo los Sacramento Kings, tiene doble nacionalidad. Nacido en Portland, Oregón, pero representa a la selección de Lituania al ser hijo de una leyenda de ese país en el baloncesto, Arvydas Sabonis.

Estamos hablando del pívot de 2,16 metros de estatura y 26 años, Domantas Sabonis. Aunque dentro de la pintura por su físico, no es el de Nikola Jokic o Joel Embiid, pareciera no ser un jugador dominante dentro de la pintura, su estilo de juego y manejo del cuerpo, lo han convertido en uno de los jugadores más versátiles y de los mejores ala-pívot o centros de la Liga.

El ataque de los Kings gira alrededor de Sabonis, no necesariamente para que sea él quien anote, pues constantemente se le ve saliendo al perímetro para recibir el balón, dar un mano a mano y de ahí buscar un rebote ofensivo o una mejor posición debajo de la canasta. Por eso los buenos números en los tres rubros principales en términos estadísticos: 19.1 puntos, 12.3 rebotes y 7.3 asistencias por partido, para un 61.5% de efectividad en tiros de campo.

El director de orquesta

Los Sacramento Kings se quedaron con otro de los premios entregados por la NBA a los mejores de la temporada. Mike Brown se convirtió en el primer entrenador en ser elegido de manera unánime en la historia del galardón al coach del año, siendo esta la segunda vez que lo gana luego de haberlo recibido en el 2009 cuando dirigía a los Cleveland Cavaliers.

Terminar con la sequía más larga sin entrar a playoffs, no solo para la franquicia de los Kings, sino de la historia de la Liga, desde la salida de Rick Adelman en 2006, no era tarea fácil. Algunos nombres históricos que lo intentaron sin éxito fueron Mike Malone, George Karl o Dave Joerger, para un total de 11 entrenadores que pasaron por el banquillo de Sacramento en este lapso.

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Pese a ser un hombre alejado del protagonismo, es uno de los más ganadores de la historia de la liga, quizá el estar fuera de los focos era lo que necesitaba un equipo joven como los Kings, lo que hace de su campaña algo aún más excepcional.

El cuento de hadas de la franquicia se sigue escribiendo 2-1 a favor en la serie ante unos temibles Warriors, 2 victorias más los pondrían en las semifinales de la Conferencia Oeste en estos playoffs de la NBA.