Los dos pilotos españoles de la parrilla de Fórmula 1, Fernando Alonso (Aston Martin) y Carlos Sainz (Ferrari), insistieron que su rivalidad no afecta a la amistad entre ambos, en la conferencia de prensa previa al Gran Premio de Austria.
Alonso, de 41 años y doble campeón del mundo, y Sainz, de 28, volverán a enfrentarse en la pista el próximo fin de semana y negaron que su relación se haya deteriorado, como publicaron algunos medios españoles.
El veterano piloto de Aston Martin calificó el nivel del periodismo español como "bajo" y señaló esta razón como "una de las muchas por las que, desafortunadamente, tratamos de evitar nuestro país".
Tras dos temporadas decepcionantes en la escudería Alpine, Alonso está siendo una de las revelaciones de la temporada con su Aston Martin, con el que ha subido al podio en seis de las ocho carreras disputadas y está tercero en el Mundial con 117 puntos, solo superado por los dos Red Bull (195 para Max Verstappen y 127 para Sergio Pérez).
Carlos Sainz y Ferrari están teniendo más problemas y el piloto madrileño ocupa la 5ª plaza en la clasificación, con 68 puntos, doce más que su compañero Charles Leclerc.
Alonso y Sainz han tenido varios duelos eléctricos esta temporada y una maniobra del madrileño provocó un trompo del asturiano en Australia. Pese a todo, ambos insistieron en que su relación es buena.
"Somos buenos amigos dentro y fuera de los circuitos", declaró Alonso, en presencia de Sainz, ante los periodistas.
"Se han escrito muchas tonterías y este año, como tengo un coche competitivo y estamos peleando de cerca en la pista... En España somos así", añadió el asturiano.
Sainz, por su parte, admitió que esta temporada compite con Alonso por los mismos puestos, pero que ello no ha afectado a su amistad. "No necesitamos una conferencia de prensa para probarlo o demostrarlo. Si nos ves en el desfile de pilotos o en el 'paddock', verás que nuestra relación es la de siempre".
Y reivindicó que ambos son ya suficientemente veteranos para "saber separar lo que pasa en la pista y fuera de ella".
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"Simplemente, queremos disfrutar del momento, porque es un buen momento para la F1 en España y no vale la pena estropearlo con estupideces que se puedan decir", añadió.
"Ni siquiera merece la pena prestar atención o comentarlo (su supuesta enemistad), porque es dar importancia a gente que solo quiere hacer el mal", denunció el madrileño.
Si ambos acabaran en el podio este fin de semana, sería la primera vez en la historia en que dos pilotos españoles acabaran en un podio en una carrera de F1. "Fernando está en el podio en casi todas las carreras, así que soy yo quien está evitando que eso suceda", bromeó.
Y para acabar con humor, Alonso dio la receta para conseguir ese hito histórico: "Que los dos Red Bulls no acaben".
