La selección Colombia se enfrentó con Nigeria por la semifinal del Mundial Femenino Sub-17 con el propósito de llegar de manera histórica a la final del certamen y cumplió de manera épica, pues todo se definió desde los penales con un marcador final de 6-5.
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Desde el inicio, la 'tricolor' se vio superior al cuadro africano, fue incisivo y mostró las ganas de conseguir el gol desde el inició, pero la guardameta de Nigeria, Faith Omilana, fue la encargada de evitar cualquier posibilidad.
En la segunda parte, las dirigidas por Carlos Paniagua tomaron la misma actitud de jugar el balón y controlar el partido, incluso, impidieron las llegadas constantes de sus contrarias, pero nuevamente estuvo más que presente la guardameta del elenco africano y no dejó combatir su malla.
A pesar de todos los intentos, el compromiso se definió por tiros desde el punto penal, donde Colombio hizo su labor y ahora deberá esperar rival entre Alemania y España.