Para los futbolistas ingleses, Alemania es el enemigo acérrimo, generación tras generación: la prensa popular agita los recuerdos de la lucha contra el nazismo, y el Inglaterra-Alemania del martes en Wembley supondrá un capítulo más de una rivalidad casi tan antigua como el fútbol.

Para los alemanes, el antagonismo con Países Bajos es más fuerte, pero la patria de Franz Beckenbauer tiene aún atragantado el 'gol de Wembley' de 1966, en la final del Mundial, uno de los goles más polémicos de la historia del fútbol.

Antes de su duelo de octavos de la Eurocopa el martes en Wembley, estos son algunos de los partidos que forjaron la leyenda de esta rivalidad:

El 'Wembley Tor'

30 de julio de 1966: desde el siglo XIX, las dos naciones se enfrentaron varias veces en amistosos, pero la final del Mundial de 1966 en Wembley fue su primer partido oficial. Los 90 minutos finalizan con 2-2, y en la prórroga, minuto 101, Geoffrey Hurst lanza un potente disparo al larguero. La pelota bota sobra la línea y sale fuera. Después de unos segundos de duda, el árbitro concede el gol en medio de las protestas alemanas. En la época no existía ninguna tecnología para ayudar a esclarecer esas jugadas.

55 años después, ni siquiera los modernos programas informáticos pudieron establecer si la pelota rebasó la línea o no. El 'Wembley Tor' (Gol de Wembley) se convirtió en alemán en una expresión para denunciar un profundo sentimiento de injusticia.

Los ingleses se impusieron 4-2 y se proclamaron campeones del mundo.

Con Beckenbauer y Gerd Müller

14 de junio de 1970: Cuatro años después, las dos selecciones se reencontraron en cuartos de final del Mundial de México, ofreciendo uno de los partidos más épicos del torneo. En el minuto 67, Inglaterra gana 2-0 cuando el joven Franz Beckenbauer marca un gol al arquero inglés Peter Bonetti.

La remontada había comenzado. Uwe Seeler empató en el minuto 82, y después Gerd Müller dio la victoria a los suyos en la prórroga (3-2), eliminando a la vigente campeona del mundo. 

Malditos penales

4 de julio de 1990: En su tercer partido de eliminación directa en un Mundial, Alemania e Inglaterra tuvieron que dirimir el pase a la final en una tercera prórroga. Pero después de los goles de Andreas Brehme y Gary Lineker, en el tiempo reglamentario no cambió el resultado.

Los alemanes ganaron en los penales, dando inicio para los ingleses una serie negra en esa suerte, con seis eliminaciones consecutivas en penales en grandes torneos consecutivas (hasta el Mundial-2018 y la victoria contra Colombia 1-1, 4 a 3).

26 de junio de 1996: un 'déjà vu' en semifinales de la Eurocopa-1966. En Wembley, los penales volvieron a resultar fatales para los ingleses. Gareth Southgate, actual seleccionador de los Three Lions, falla en penal decisivo.

Los ingleses asisten al triunfo de sus enemigos alemanes unos días después en la final ante República Checa (2-1).

La humillación de Múnich

1 de septiembre de 2001. En fase de clasificación al Mundial-2002, los alemanes triunfaron de nuevo 1-0 en Wembley, y estaban seguros de su superioridad para la vuelta en su fortaleza de Múnich. Con apenas seis minutos jugados abrieron el marcador por medio de Carsten Jancker. 

Pero la tempestad inglesa de desató: Michael Owen firmó un hat-trick (12, 49, 65), Steven Gerrard (48) y Emil Heskey (73) también anotaron. Alemania sufrió la peor derrota de su historia sobre su suelo.

"Una supercatástrofe industrial, una explosión nuclear que me dejará cicatrices para toda la vida", exclamó el arquero alemán Oliver Kahn.

La revancha de Wembley

27 de junio de 2010. 'La revancha de Wembley', titula el periódico alemán Bild después de este duelo de octavos del Mundial en Bloemfontein, en Sudáfrica, ganado 4-1 por Alemania.

Con la 'Mannschaft' ganando 2-1, Frank Lampard estrella un balón en el larguero que rebota dentro de la línea de gol, como demuestran las imágenes. Pero Manuel Neuer lo atrapa rápidamente, y el árbitro, mal situado, no concede el gol (aún no existía la tecnología actual).

Un joven Thomas Müller, que podría jugar el martes, anota los goles 3º y 4º de su equipo.

Ése fue el último Inglaterra-Alemania en partido oficial.