Una fecha que para el fútbol colombiano significa mucho más que un simple día en el calendario. Es la fecha en que se recuerda uno de los episodios más trágicos de este deporte: el autogol de Andrés Escobar en el Mundial de Estados Unidos 1994.
Previo al mundial, la selección Colombia era una de las grandes favoritas. Con un invicto de 27 partidos, una goleada 5-0 a Argentina en Buenos Aires y figuras como Carlos Valderrama, Faustino Asprilla, Leonel Álvarez, Freddy Rincón y Adolfo Valencia, el equipo despertaba ilusión en todo el país.
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Un inicio de mundial marcado por la tragedia
Sin embargo, el sueño mundialista se derrumbó rápidamente. La derrota 3-1 ante Rumania en el primer partido ya encendió las alarmas, pero fue el segundo encuentro, contra Estados Unidos en Los Ángeles, el que marcó un antes y un después.
El fatídico autogol de Andrés Escobar
En el minuto 23 del partido contra Estados Unidos, Andrés Escobar, intentando cortar un pase, marcó un autogol que puso a Colombia en desventaja. La imagen del defensor, cabizbajo y con la mirada perdida, se convirtió en una de las más icónicas del fútbol colombiano.
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Derrota, eliminación y el inicio de una tragedia
Colombia cayó 2-1 ante Estados Unidos y quedó eliminada del mundial en fase de grupos. La decepción y la frustración se apoderaron del equipo y del país. Lo que nadie imaginaba era que la tragedia apenas comenzaba.
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El asesinato de Andrés Escobar
10 días después del autogol, el 2 de julio de 1994, Andrés Escobar fue asesinado a las afueras de un establecimiento comercial en Medellín. Su muerte conmocionó al mundo entero y puso en evidencia la violencia que azotaba a Colombia en ese momento.
Andrés Escobar no solo fue un gran futbolista, sino también un símbolo de la lucha contra la violencia. Su muerte sigue presente en la memoria del fútbol colombiano y es un recordatorio de que el deporte no debe llegar jamás a esas circunstancias.
