En su regreso a la Copa Sudamericana, Atlético Nacional propinó una dura derrota este miércoles al Huracán de Argentina por 3-0 y comenzó a exhibir sus credenciales de favorito, tras el juego que disputó en casa por la primera fase del torneo.

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El equipo colombiano dejó herido de muerte al Globo con goles de Daniel Muñoz (32), Jefferson Duque (38) y Vladimir Hernández (42), en el duelo que sostuvieron en el estadio Atanasio Girardot.  El cuadro que dirige Juan Carlos Osorio irá con una ventaja sólida a la revancha en Buenos Aires el 19 de febrero. 

El regreso de Atlético Nacional a la Sudamericana después de cuatro años fue a lo grande, con goles y un fútbol efectivo y vistoso por momentos.  Los hombres de Osorio, exseleccionador de México y Paraguay, mostraron sus serias intenciones de ir por el título que le hace falta a su palmarés, tras conquistar la Copa Libertadores de América en 1989 y 2016.

Hace cuatro años debieron ceder la Copa Sudamericana ante la tragedia que envolvió a su rival en la final, el Chapecoense de Brasil, que perdió buena parte de su plantel en un accidente aéreo cuando se dirigía a Medellín. 

Sin reacción

Los verdes apabullaron a Huracán después de los 20 minutos de juego. De a poco fueron aumentando el volumen de ataque por los costados hasta que encontraron, por derecha, la vía del triunfo.

Andrés Andrade, el 10 del Atlético Nacional, sirvió la primera pelota para que Daniel Muñoz viniera de atrás para abrir el marcador. Un pase limpio para que el defensa venciera al experimentado arquero Antony Silva.  Seis minutos después, Jefferson Duque anotó el segundo gol tras recibir un centro, también por derecha, del volante Yerson Candela. 

Huracán no reaccionó. El cuadro que dirige Israel Damonte se desdibujó por completo, lo que le permitió a los de Medellín adueñarse de la pelota y pasar, sin reservas, a la ofensiva. Andrade repartió pelotas a placer; Duque se paseó por los predios de Silva cuando quiso y la estocada, en el primer tiempo, la dio el Vladimir Hernández.

El atacante prácticamente sentenció el juego luego de una jugada de filigrana en la que Duque puso el pase definitivo.  Humillado, El Globo se fue a las duchas.   Damonte, sin embargo, no encontró cómo sacudirse del dominio colombiano. No solo salió goleado, sino que apenas logró pisar los predios defendidos por José Cuadrado.

Sobre el cierre del partido, Nicolás Cordero, quien ingresó en la segunda parte, quedó a mano a mano con el portero colombiano, pero Cuadrado lo privó del descuento. Huracán, que no dejó nada para destacar en su visita, deberá exigirse al máximo para inclinar una llave que ya parece sentenciada a favor de los colombianos.